martes, 25 de noviembre de 2014

Sueño y Lactancia

El sueño es un proceso madurativo como lo es el caminar o el control de esfínteres. Hay que saber que el sueño de los bebés no es igual que el de los adultos y por tanto no podemos pretender que duerman como nosotros. El sueño del niño no será similar al del adulto hasta lo 5 ó 6 años.

Un bebé ya duerme en el útero materno. No necesitas enseñar a dormir a tu bebé, sino que como he dicho antes, es un proceso madurativo y lo irá haciendo poco a poco. Pretender enseñar a un bebé a dormir dejándole llorar, aunque sea un poquito cada noche, sólo conlleva a su sufrimiento. El bebé termina dejando de llorar, no porque haya aprendido a dormir sino porque se ha resignado, ya en la cuna sabe que de nada sirve pedir ayuda porque nadie le atenderá ni consolará. El llanto no consolado de un bebé genera altos niveles de cortisol.

Como el cerebro no aguantaría esto, secreta endorfinas y serotonina, con lo que el niño se duerme, autodrogado. Es una manera del cuerpo de que no se produzca un cortocircuito debido a los altos y dañinos niveles de estrés y cortisol. En estas edades en las que el cerebro del bebé está en pleno desarrollo, este estrés constante y los altos niveles de cortisol continuados, provocan graves daños en su desarrollo.

Imagen tomada del cuento Tu, yo y la teta

Veamos la evolución del sueño del bebé:

- Bebé recién nacido, hasta los tres meses. Cuando el bebé nace sólo tiene dos fases de sueño, comparado con las cinco que tenemos los adultos. Por otro lado no tiene asimilado el ciclo circadiano (no diferencia entre día y noche). El sueño en esta etapa se caracteriza porque el bebé hace siestas cortas con despertares frecuentes, de día y de noche. Esto se debe a que necesita comer a menudo, ya que su estómago es muy pequeño y la leche materna se digiere muy fácilmente. Por otro lado el bebé necesita succionar, es su manera de relajarse, además de ser muy importante también para su desarrollo. Y por último, y no menos importante, el bebé necesita sentirse seguro en el regazo materno. La lactancia no es sólo alimento físico sino también emocional.

- De 4 a 7 meses: El bebé comienza a dormir algo más de noche que de día, pero su sueño puede ser inestable. Alrededor de los 6-7 meses el bebé adquiere el resto de fases de sueño, lo que hace que su sueño sea más inestable y tenga más despertares al ir aumentando las fases de sueño. Los adultos también nos despertamos entre una fase y otra, pero si no hay nada que nos desvele continuamos durmiendo sin darnos cuenta. Sin embargo, el bebé está aprendiendo y suele despertarse porque aún no ha aprendido a enlazar las fases de sueño y porque además es su modo de supervivencia. Las fases de sueño de un bebé suelen ser de unos 45-60 minutos aproximadamente.

- De 8 meses a 2 años: El momento del sueño puede ser inquieto. Es una etapa de grandes cambios: introducción de la alimentación complementaria, la exploración del entorno, la salida de los dientes, el período de la angustia de separación y el control de esfínteres. En esta etapa necesita mucha seguridad y saber que siempre estaremos a su lado cuando nos necesite.

- De 3 a 6 años: A esta edad el niño suele dejar de dormir la siesta. Es una etapa donde se siguen dando muchos cambios y al ser más consciente de las cosas pueden comenzar los miedos, lo cual se puede reflejar también en el sueño. Puede haber terrores nocturnos (que pueden comenzar ya en torno a los 6-7 meses), sonambulismo o pesadillas.


¿Qué puedes hacer?

- Infórmate acerca del proceso normal del sueño de los bebés. Sabrás que es normal que tu bebé se despierte por la noche y no verás un problema donde no lo hay. Quizás no duermas todo lo que te gustaría pero sabrás que a tu bebé no le pasa nada. Te recomiendo que los primeros meses aproveches para dormir siempre que lo haga tu bebé.

- Acompaña a tu bebé en este proceso, como en cualquier otro, respetando sus procesos madurativos. La lactancia te ayuda, especialmente por la noche, a que tu bebé vuelva a conciliar fácilmente el sueño, ya que entre otras cosas contiene triptófano. El colecho facilita la lactancia y vuestro descanso.

Para estar informada sobre los benerficios del colecho y cómo colechar de forma segura, te recomiendo leer el artículo Colecho Seguro.


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Referencias: “Dormir sin lágrimas” de Rosa Jové

2 comentarios:

  1. Me ha encantado este post. Me gustaría mucho compartirlo en mi blog. Te pido permiso...
    Gracias!

    Un saludo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Claro que lo puedes compartir, siempre que menciones su procedencia.

      Gracias a ti.

      Un saludo

      Eliminar